¿Cuántas veces nos hemos dejado llevar por las emociones?

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    Parense un segundo a reflexionar sobre esta pregunta: ¿Cuántas veces nos hemos dejado llevar por las emociones?

    Seguramente ninguno de ustedes podrá decir que nunca, si es verdad que muchas personas mantinen mayor autocontrol que otras, pero pongo la mano en el fuego de que nadie podría decir que nunca 

    El tema de las emociones me parece tan maravilloso como diverso, es un mundo totalmente diferente del que nos quedan muchas cosas por descubrir, incluso lo más impactante es como se llevan a cabo, sorprendentemente tiene que ver con nuestro sistema biológico.

    En la educación se recomienda enseñarles cuanto antes qué emoción están sintiendo para poder crear un mayor autocontrol de mayores para no caer en la desesperación y podamos afrontar los problemas con mayor fuerza.

    También en este curso hemos podido aprender que hay emociones que se aprenden como es el miedo, esta teoría está demostrada por John B. Watson quién experimentó con el Pequeño Albert (ahora prohibido), el experimento consistía en:

    1-En primer lugar se le mostraba una rata, pudieron observar que jugaba con el animal sin mostrar ningún signo de miedo.

    2-En segundo lugar se le volvía a mostrar la rata pero esta vez acompañado de un furte sonido que aterró al Pequeño Albert (este paso se llevó a cabo varias veces más).

    3-Y por último ante la presencia de la rata, el Pequeño Albert se ponía muy nervioso y empezaba a llorar.

    Así el Pequeño Albert aprendió a tener miedo mediante el procedimiento de condicionamiento clásico.

    Respecto a la pregunta anteriormente formulada y bajo mi punto de vista y experiencia propia, es difícil controlarse una vez que te inundan emociones como rabia, ira, odio... son momentos en los que no piensas en nada más que en lo que te ha hecho sentir así, y por este mismo motivo debemos aprender a ponerle nombre cuanto antes, ya que al gual que los problemas, lo primero es reconocerlo y solo alacanzado este paso podremos poner solución.

 

    También están las emociones positivas como alegría, esperanza, orgullo,asombro, amor... Para mí, no hay nada más bonito que llorrar de la emoción, y es que cuando esto ocurre, un cosquilleo recubre todo tu cuerpo llegando a hacer salir las lágrimas de tus ojos.

    Sin duda la dificultad de su clasificación es porque son abstractas, no podemos ni verlas, ni oirlas, ni tocarlas, solo las sentimos y debemos de poner un nombre a cada sensacón, tarea bastante difícil.

Fdo: Leyre Castillejo Sanz